La Asamblea Nacional de Venezuela formalizó este jueves su intento de evitar que el país abandone la Organización de Estados Americanos (OEA).
El presidente de la Asamblea Nacional (AN) y miembro de la oposición, Julio Borges, entregó al secretario general de la OEA, Luis Almagro, una resolución en la que establece la nulidad de la solicitud de retirada de la organización que presentó el Ejecutivo venezolano el pasado 28 de abril.
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El gobierno de Nicolás Maduro decidió dejar de ser miembro de la OEA como protesta ante la convocatoria de una reunión de cancilleres con el fin de tratar el conflicto social que aqueja al país sudamericano, donde un mes de protestas antigubernamentales ha dejado una treintena de muertos.
La resolución de la AN fue aprobado el pasado martes y pide que se declare "nula e inconstitucional" la solicitud del gobierno.
Los parlamentarios defienden que "los pactos internacionales sobre derechos humanos" tienen "rango constitucional" y, por lo tanto, "no hay fórmula" para abandonarlos.
Los pasos que la organización supranacional vaya a tomar a partir de ahora son inciertos, ya que ningún país se había retirado por voluntad propia en sus 65 años de historia.
Pero fuentes de la OEA explicaron a la Agencia EFE que la organización deberá estudiar la normativa internacional, la venezolana y su propia regulación antes de tomar una decisión, por lo que esto tardaría meses.
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